Dragonfly

En vista de que me olvidé del cumpleaños número uno de este blog, este gran espacio que me libera la mente y el corazón, que además no celebré el post número 100, ni el 200, ni el 300, ni el 400 y en vista de que hoy me siento medio ermitaña pero aún así llena de sentimientos, cariño y muchas otras cosas hermosas que se revolotean entre mi corazón y cerebro.

He decidido celebrar este post No. 433. Celebrar por el amor que llevo dentro por esa personita que me trae de cabeza, por mi familia, que aún cuando da dolores de cabeza, siempre están allí para apoyarme cuando yo doy dolores de cabeza, por mis tres sobrinos hermosos que me hacen ver la vida de otra manera, por el trabajo que me estresa y me pone de mal humor (sobre todo mi jefe), pero que me llena a la vez de muchas satisfacciones personales y me hace sonreír.

He decidido celebrar por la amistad a pesar de la distancia, por todos ustedes que están lejos, pero a la vez muy cerca y en mi corazón, por la maravilla de Internet y del teléfono (ya que he tenido el placer de escuharlos a varios de ustedes al otro lado del teléfono), por el amor en mi y en la gente que me rodea.

Felices 433 post!!!

La champagna viene más tarde, de momento pasen, sírvanse del tequilita, las caipirinhas, el vodkita y todo ese material inflamable que anda por allí, le recomiendo el vino blanco, esta de maravilla.

Besos para todos, gracias! por venir siempre por acá.