
Ayer me di cuenta, una vez más, que uno no tiene todo lo que quiere, pero definitivamente, lo que tiene, lo tiene porque se lo merece.
Ayer me dí cuenta que es divertido escribir una entrada pensando en mañana, escribirla hoy y hablar de ayer (ya vieron... esta locura no tiene remedio).
Ayer me di cuenta que soy "La mujer más ñoña del mundo" (gracias Ludo) y que eso me hace feliz.
Ayer. me di cuenta que tengo una fuerza de voluntad más grande de lo que pensaba, pero que inevitablemente me rindo ante cualquier tentación que incluya la palabra "México", dentro de ella.
Ayer me dí cuenta que escribía el post número 499...
Hoy...
Hoy, me doy cuenta, que escribo el post No. 500 (wow! ya ven lo bien que estoy en matemáticas).
Hoy veo que han pasado exactamente, dos años, un mes y 22 días desde mi primer post... y que en este tiempo he evolucionado (o desevolucionado), como ustedes lo quieran ver, pero yo, me siento mejor persona de lo que era.
Hoy me ASOMBRO del aguante de ustedes... Sé, que en el camino quedaron unos perdidos, pero unos cuantos, contados con los dedos de una mano, han sido fieles y siguen haciendo comentarios, después de 500 Locos posts.
Hoy me sonrío al ver, como todo ayer salió de la manera en que salió, de como "WOW! y Yipeee!" son solo expresiones, pero han tatuado mi alma.
Hoy me di cuenta que ayer hice llorar a "La Peque" con "dulces palabras", con las palabras que ella merecía escuchar, palabras que me salieron del alma, palabras que siento tras muchas conversaciones en el messenger, una conversación telefónica y conocernos a través de fotografías, palabras que no se avergonzaron de salir, a pesar de los 5.500 kilómetros (aproximadamente) que nos separan.
Hoy me di cuenta que ayer, el cariño venció el orgullo... Katto... sinceramente no hablaba con vos desde hace mucho, pero me moría de las ganas por hacerlo, por contarte tantas cosas que quería que vos amiga supieras... pero bueno como dicen "El diablo es puerco1" y ya me había cansado de tener que ser yo quien te saludaba todos los días.
Mañana...
Aún no sé si tendré un mañana, si el libro de la vida me prestará un día más para seguir compartiendo mi locura y mi optimismo, solo sé, que después de 500... está el 501. Plop!
Gracias a todos los que se toman el ratico de pasar por acá, de estar junto a mi a pesar de la distancia, de los que comparten conmigo, tal vez no día a día, pero si pasan y dejan sus huellas.
PD. Efectivamente, se desprende de una optimista como yo que: 1. prefiero ver los 499 pollos amarillos que el pollo negro. 2. Que disfruto al sentirme como ese pollo negro, diferente a todos los demás. 3.Que no podría haber encontrado mejor imágen para este post.